Ingrid Castro U.
Ing. Agrónomo
Directora de Laboratorios
Cooprinsem
La proteína macronutriente es esencial en la alimentación animal, compuesta por aminoácidos, que son las unidades estructurales involucradas en el crecimiento, mantenimiento y desarrollo muscular, así como en la formación de tejidos como músculos, tendones y piel.
Los organismos superiores no pueden sintetizar ciertos aminoácidos, por lo que deben ser obtenidos a través de la dieta. Estos se denominan “aminoácidos esenciales” e incluyen la lisina, metionina, treonina, triptófano, isoleucina, leucina, histidina, valina, fenilalanina y arginina. La cisteína y la tirosina se consideran aminoácidos semi-esenciales, ya que la cisteína puede ser sintetizada a partir de metionina, y la tirosina puede generarse a partir de fenilalanina.
En promedio, el 60% de la proteína consumida se degrada en el rumen a aminoácidos, que son incorporados por las bacterias, además de transformarse en compuestos más simples, especialmente amoníaco, el cual se reutiliza para la síntesis de aminoácidos. Si se produce un exceso de amoníaco, este se difunde a través de la pared del rumen y se convierte en urea en el hígado. Parte de esta urea se recicla en la saliva y otra parte se excreta a través de la orina. Los microorganismos del rumen también pueden sintetizar aminoácidos a partir de otros aminoácidos o de compuestos nitrogenados simples, satisfaciendo así sus propias necesidades. Al ser digeridas posteriormente, las proteínas de estos microorganismos son aprovechadas por el animal.
El balance adecuado de aminoácidos en las raciones tiene efectos positivos en la producción animal. Un perfil óptimo de aminoácidos puede resultar en mayores rendimientos de leche, mayor producción de componentes y una mayor rentabilidad del rebaño, gracias a menores costos de alimentación y mejores rendimientos lecheros.
En el último año, el análisis por espectroscopia del infrarrojo cercano (NIR) ha permitido medir la concentración de ciertos aminoácidos, lo que representa un gran avance en la formulación de raciones y en el monitoreo de forrajes y materias primas. Esta técnica es más accesible y menos costosa que los métodos de química húmeda tradicional.
Investigadores de Dairyland Labs, en un boletín reciente, señalaron que, desde que comenzaron a ofrecer el análisis de aminoácidos por NIR, han observado que las muestras de ensilaje de pradera con alto contenido de amoníaco (o proteína soluble) presentan niveles sistemáticamente más bajos de aminoácidos. Algunos aminoácidos parecen verse más afectados que otros, lo que podría explicarse por un proceso de desaminación debido a una fermentación deficiente o a un ensilaje prolongado.
El monitoreo continuo de la concentración de aminoácidos en forrajes y alimentos, mediante un análisis rápido y económico, permitirá a los asesores nutricionales evaluar requerimientos que han sido poco estudiados, sobretodo en animales en pastoreo, además de identificar factores que pueden influir en la disponibilidad de estos nutrientes desde los alimentos suministrados.
El Laboratorio de Forrajes de Cooprinsem, comprometido con ofrecer información valiosa a través de sus análisis, pone a su disposición el análisis NIR Plus, que incluye un completo análisis nutricional y un perfil de aminoácidos que incluye: lisina, metionina, isoleucina, leucina e histidina, para praderas, ensilajes y diversas materias primas. En el Cuadro 1 se presenta los resultados preliminares de concentración de aminoácidos en muestras analizadas por NIR, en nuestro laboratorio.